12/25/2008

Navidad, regalos, villancicos y demás laberintos

Escribo estas líneas para mis amigos:

La típica o atípica Navidad (como deseen adjetivisarla) , llegó y pasó con su laberinto hormonal de coloridas luces, hostigantes ritmos navideños, ruidosos juguetes pirotécnicos, y regalos que cada vez me importan menos porque cada vez más integrantes de mi familia se desvanecen en las nuevas fotos navideñas. En mi casa el 50% de mi corazón esta en un país que considero capitalista, y que por primera vez en su historia está sufriendo de su propia mega economía (es en este pequeño momento que creo en la justicia de Dios y que por haber causado tanto dolor a pueblos de extrema pobreza como son los musulmanes está cayendo el puño de Dios sobre ésta potencia mundial), aunque sé que mi gran amiga nacidas ahí y mis buenos amigos residentes son inocentes de toda acusación.

Continuando con ello el 10% de mi corazón está “en algún lugar de LA MANCHA del cual no quiero acordarme”-recordando al Quijote- con Dulcinea del Toboso. El porcentaje restante es para mis padres y familia 30% y el 10% restante es para ustedes mis amigos.

De niño en mi colegio realizaban el típico concurso de villancicos, nos vestían con ropas ridículas y pañoletas gay de tal manera que hacíamos el ridículo frente a todo el colegio con la única finalidad de que las mamás o familiares se sientan orgullos de ver a sus queridos cantar canciones como: "Con mi burrito Sabanero voy camino de Belén, Con mi burrito Sabanero voy camino de Belén... si me ven si me ven voy camino de Belén", no se dan cuenta que esas canciones no tienen sentido, siempre opino que la música que debes oír es la música con la que debes identificarte, acaso vas a llegar a Belén, tus papás no te dejan ir a la tienda solo y encimas vas a ir en burro a Belén?... no sé porque nos hacían esto, felizmente esa parte de mi niñez la he olvidado, claro menos la parte del burro, que siempre era alguien que se disfrazaba y que al final del cántico en el backstage demolíamos a patas y puñetes.

Alguna vez sus mamás o familiares han comprado luces navideñas para decorar la casa pero ellas venían con un bendito pitido que no dejaba de sonar hasta que lo desenchufes, eso es peor que comer el pavo de una de tus tías que recién se ha casado y que ha invitado a la familia entera a cenar porque esta estrenando departamento nuevo y la verdad hasta que es la primera ves que cocina y te toca el pavo crudo con una ensalada agridulce que no tiene nada de ello si no que le salio amarga. ¡Es un verdadero fastidio!

Los benditos regalos, es la parte más estresante de la navidad mi mamá, mi madrina, hasta mi abuela y demás familiares ¿saben lo que realmente necesito? Rpta: Negativo. Mi mamá cree que con una camisa vas a ser gerente, mi papá dice que a mi edad con un pantalón de dril pareces gente, mi madrina, hoy tuvo la típica excusa “me olvide la tarjeta” y mi abuela se molesta en darnos un sobre con dinero y así limpiarse de toda culpa de que les gusto o no le gusto el regalo. Me pregunto ¿donde quedó la emoción de los regalos?, ¿que tanto conocen los padres a sus hijos?, esta bien decirle a tu hijo ¿que quieres para navidad?, o ¡vamos a comprar tu regalo!, ¿donde quedó la sorpresa?, ósea que por las puras escribíamos hechos unos pequeños estupiditos unas cartas inmensas con posibles regalos que PAPÁ NOEL traería si te habías portado bien?... Por favor cuando sea padre no me permitan hacer esto, para eso son mis amigos.

Cuando eres niño es todo mas fácil, comprarle un regalo a un niño es casi pan comido, sorprenderlo es más fácil aún, y lo mejor no saben cuanto te costo su impresionante regalo.

Siempre una de mis tías cincuentonas me ha dicho: “los regalos no importan dale gracias a Dios porque estas con tu familia”, ok es cierto en parte, BUT IT’S LIE!!!... a quien no le gusta recibir un regalo, a ver tía, te has visto la cara cuando tu ahijada te dice que debajo del árbol hay una sorpresita para ti?, o sea el caso de que nadie se acuérdate de ti?, has visto tu gesto de desilusión, entonces, los regalos si importan y de ello depende tu animo de toda la noche.

Ahora que me pongo a pensar, los mejores regalos vienen de tu pareja o de tu pretendiente, ellos son capaces de sorprenderte y dejarte boquiabierto, además de querer ser la primera persona en decirte FELIZ NAVIDAD!!! por teléfono.

Lastimosamente lo único que recibí este año fue un mensaje de texto en mi móvil de parte de mi primita de 14 años: “Jale mi curso, no tengo navidad”.


A todo esto no es que con el tiempo me haya convertido en un grinch, como me decía alguien a quien quiero en demasía los primeros meses de relación, pero creo que aparte de todo hay que tener un verdadero sentido de las cosas, se trata de ver las cosas sin parámetros y sin absurdas supersticiones ajenas, los momentos para mi tienen colores y como todo, nada es bueno ni malo al mismo tiempo, solo depende de la perspectiva.

No voy a decir “Feliz Navidad a Todos, que Dios les bendiga y a su familia tambien” porque esa es la misma canción de siempre. Hasta el más hipócrita te dice ello.

Feliz Navidad sean geniales, porque para mi lo son!

Les quiero!

Pedro Chalén Ciudad